La calefacción es un servicio imprescindible en los hogares. Podemos encontrar una amplia variedad de calderas para calefacción en el mercado. La principal diferencia entre ellas, se basa en la forma en la que entra el aire necesario para la combustión.
Según el tipo de caldera, se pueden utilizar diferentes tipos de combustibles. Estas son algunas de las más utilizadas:
Contingut
Calderas atmosféricas
Se trata del modelo de caldera más antiguo y simple. Estas aprovechan el oxígeno de la habitación donde se encuentran para realizar la combustión y lo expulsan al exterior. Éstas calderas están totalmente influenciadas por las condiciones climáticas, como el viento o la lluvia.
Calderas estancas
Estas calderas llevan a cabo el proceso de combustión en un compartimiento que está cerrado herméticamente y expulsan el gas caliente mediante un ventilador. Este proceso hace que sean más seguras y eficientes, ya que su rendimiento no depende de las condiciones atmosféricas.
Calderas de baja emisión
Las calderas de baja emisión son muy similares a las anteriormente mencionadas. Sin embargo, están diseñadas para reducir el consumo de combustible. Además, expulsan una menor cantidad de gases contaminantes, por lo que muchas personas optan por instalar este tipo de dispositivos en sus hogares y negocios.
Calderas de condensación
Las calderas de condensación aprovechan al máximo la energía extraída del combustible, ya que el gas se quema a temperaturas mucho más bajas. Poseen un rendimiento bastante superior al de los demás calentadores. Además, su vida útil es notablemente mayor.
Calderas mixtas
Este tipo de calentador se ha convertido en uno de los más utilizados en todo el mundo. Disponen de dos circuitos diferentes, uno que está destinado a la calefacción y otro para el agua caliente sanitaria, lo que hace que sea muy versátil.
Calderas con microacumulación
Estas calderas poseen un diseño muy ingenioso. Disponen de un compartimiento para agregar agua precalentada. De esta manera, no hay que esperar a que salga el agua caliente en el momento de abrir el grifo. Es ideal para las zonas con temperaturas muy frías.